Un pájaro escondido
detrás de sí mismo
antes de piar y decir
que su ala no está rota
que su ala no
Que es sólo el mundo
Que es el mundo solo
Sabe que de noche
hay quien lo ve y nos oye
Que hay ramas como abrazos
y brazos como prisiones
Pero detrás de su sombra
hay un reposo
un sosiego que otea los desguaces...
esas renuncias firmadas al pie
de los que no se arrodillan
Y se salva
justo en el borde de la bondad
Se salva de tanta salva de hipocresía
A contraluz, en el humo
de mi último fuego
me extremo en su vuelo
me anfibio
Y los libres, sueltan chispas
caminando sobre el mar
"Juan Domingo, el visitante" © Silvina Sanseverino
No hay comentarios:
Publicar un comentario