sábado, 14 de marzo de 2009

Susurros

En el caos
de tu sangre
conmovida
y desarmada
intento
desplazarme
simulando
inútilmente
una destreza
Los enigmas
eran otros
y ya no
se descifran
en el vaho
porque mienten
los espejos
y te ayudan
a huir
multiplicado
Y te vas
Herido
para salvarme
Caminando
hacia atrás
borrando rastros
o tal vez
para clavarme
tus ojos
Últimos
que ya no
aprenderán
a callarse
Me retuerzo
Enloquecida
de tristeza
y busco un dios
un demiurgo
que me dicte
al oído
el escondite
de esas
palabras
postreras
si me sirven
como clave
para ir
desmadejando
tu silencio
Y escucharlo
largamente
estremecida
Invadiendo
de a poco
los huecos
ruidosos
de esta guerra















Foto: "Muerte de un miliciano" Roberto Capa (1913-1954)

2 comentarios:

Ricardo Guadalupe dijo...

Intentar simular una destreza en el caos del otro es agotador, precisamente porque no se simula sino que se da sin recibir nada a cambio, supongo que eso es una prueba de amor, lo que ocurre es que luego está lo demandante que sea uno. En mi caso, quizás por inseguridad, necesito recibir, al menos para dar de verdad, de manera auténtica.

Muy bueno el poema. Gracias y un beso,
Ricardo

aNa dijo...

Gracias, Ricardo
Si,la verdad que es agotador, está buenísimo saber pedir, poder expresar lo que sentimos, lo que nos pasa ... A veces cuesta un poquito, en fin.
Gracias por tu comentario!
Saludos